El sonido se impone. Se rompe el paso. Quedaste suspendido ahí. Fuiste eso que dejaste ahí.
Todo se me ha roto. Nada ha cambiado.
Nada se me parte. Todo se queda.
Su voz cada vez mas frágil. Su cuerpo cada vez más delgado.
Mis manos grandes en sus hombros.
Tus revoluciones. Mis independencias.
1 comentario:
¡OSOM!
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