lunes, 12 de abril de 2010

abril

Fui la desconfianza del que se sabe esclavo de la lengua. Soy la honra de los que callaron bajo los puentes.


Quiero tus pasos a contra luz.


De eso que me grita en las manos cuando te tengo de frente.

De los demonios que viajan por mi pecho cuando te vas tan lejos.

Ahí, justo frente a mi, tan lejos ya.


Porque pueden tenerlo todo, porque pueden serlo todo. Hay madrugadas en que parezco otra, ellos me muestran otra.


Es entonces cuando llegan tus manos y los caminos se acentúan.


Aún no puedo mirarte como se mira eso que se olvida de a poco.

No hay comentarios: