Dos veces sonó el teléfono. Dos veces lo dejé sonar.
No creo en su timbre, no confío en su luz. Su sonido es una carcajada que retumba en mis muelas, se carcajea de mi atención, de mi simulada indiferencia.
Esperando no esperar.
Cinco tazas me he devorado, yo hace mucho dejé de tomar café, ese maldito vicio; ahora lo devoro, para que sienta como me lo trago, para que se congele en mi garganta.
No hay palabra, tengo que inventarla.
Feskapuquía. Eso es lo que soy, una Feskapuquía en repetición.
La nube llega, la nube se va. El sol aparece, el sol se va. Viento, sangre, agua, sudor, todo corre exactamente de la misma jodida manera.
¿Nadie se ha percatado de la muerte? Dónde están sus mejores trajes negros, somos vecinos del luto.
Quiero verlos en sus cuatro patas, como los animales que somos, lamiendo los neumáticos que acaban de postrar, ya no les servirían más, ningún medio los podrá llevar a donde revientan por ir.
El pintor deja su bastidor, ya no hay color.
La panadera suelta la masa, no se puede moldear.
El niño corre, se estrella con el adulto, llora, no de miedo, de asco.
Las calles transpiran estómagos, todos quieren volver lo que no han comido, lo que no podrán comer nunca más, como aquella ave de la noche: NUNCA MÁS.
Y curioso que no se den cuenta, que hay cientos de cuervos volando en nuestras sienes, nos gritan, quieren nuestros ojos, o al menos eso querían antes, ahora ya ni nuestra carne les es apetecible, prefieren la de las ratas, ellas al menos, son. Rata y nada más.
Otra vez el teléfono, no hay mesa, no hay nada en esta casa, solo un teléfono y yo. Me consuela, lo acaricio, nos amamos en el vacío, juntos somos algo, una bestia embrutecida de espera.
Error, si llegase a la sublime calidad de bestia, no esperaría más. Ser y ya.
Se dilatan mis cuencas embriagadas de sueño, se dilatan creyendo que en la oscuridad encontrarán la pregunta, esa pregunta que se mece trémula en nuestras lenguas, y por eso ya somos uno.
04 junio 2008
4 comentarios:
selene el ultimo parrafito es hermoso!!!!
besitos muchos pa uste
Lo que escribes es justo como tus sueños
y esas imágenes de las que hablas que no sé de dónde salen, pero sólo tú las ves, sólo tú las tienes. Nadie más sabe el cómo de ellas.
y nunca dejan de sorprenderme.
Gracias por compartir
A mi me gusta "El niño corre, se estrella con el adulto, llora, no de miedo, de asco."
:O a mi me gustó todo !!
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